Saturday, October 29, 2005

Solamente dos personas leen éste blog.
Una ya sabes quiés es.
La otra a veces lo sé. -sonrisa oscura-
No te asustes.

Sé que has estado leyendo esto. Asi que..... VA!

Volviéndome bruscamente, descubrí el rostro irritado de un viejo, y al mismo tiempo sentí que un perro robusto me saltaba a la espalda. Antes de que yo y mi amigo -inmovilizado del mismo modo por otro individuo algo más joven- pudiéramos rehacernos, aunque sólo hubiera sido con una palabra de estupor, resonó la voz del viejo, con tono amenazante y violento. «¡No, no!», nos gritaba, «¡aquí no se hacen duelos! ¡Vosotros menos que nadie tenéis derecho a hacerlo, jóvenes estudiantes! ¡Abajo las pistolas! Calmaos, reconciliaos, daos la mano. ¡Cómo! Vais a ser la sal de la tierra, la inteligencia del futuro, la semilla de nuestras esperanzas, ¿y ni siquiera sabéis liberaros de ese insensato catecismo del honor, ni de sus reglas, dictadas por el derecho del más fuerte?

Nietzsche, Conferencias sobre Educación.

Saturday, October 22, 2005

No sentir la herida del arrojo.

-Desearla toda-

En la lascivia de mi hombro.

Envuelta en sandias y

Lunares incandescentes

Robarle todo el veneno.

Y una vez poseída,
TODA

Sin mascara.
Bendecir la caída.

Friday, October 21, 2005

Me he hundido en la inteligencia

Más violada

Con la intención

De inventar mil abismos de verdades

transpolares

Para saber que dos y dos

No son cuatro

Y no hay problema

Y sentir la arrogancia

Dilatada de escatologías

Con la ilusión de borrar toda la mente

De un sola epoje

Así, sin llanto y ultrajes

Tan solo como lo que Es.

Manipulo porque le temo

Al futuro, a lo indecible

¿Que otra cosa podría ser?

Por eso me embriago

Creyéndome bruja con ruletas

Y loterías de estatuillas africanas

Seduciéndolo todo

Deduciéndola…

Para después decidir qué suceda

O no suceda.

Tienes razón

Me protejo demasiado.

Esa también es otra posibilidad.

La bella petición.
Espera la otra.

Saturday, October 08, 2005

Llámame hombre, mujer ó como
quieras.


No tengo guerra con
El otro- otro
La opresión siempre he sido yo.
Soy mi victima. Mi tortura.
Mi disolución.
Burlo las culpas obsoletas. Los pararrayos.
Las corazas. Soy mi propio amuleto.
¿Acaso hay otro destino?
Juzgar… Juzgar…

Llámame hombre, mujer ó como
quieras.

La guerra permanece
Siempre es de mí hacia mí.
¿De que otra manera podría serlo?
Soy la propia constructora de mis trampas.
Ese veneno también me pertenece.
Lo he creado a mi antojo.

No culpo a nadie.
Ni le rindo cuentas a nadie.
Explicaciones. Errores justificados. –Cortazar-
Me protejo de mi misma.

Llámame hombre, mujer ó como
quieras.

Mi fuerza no radica en los nombres.
En etiquetas, ideologías, que sólo profanan
La contemplación, la desobediencia,
La alegría del aire que hincha
Mis pulmones de gozo árbol y tormentas
arcaicas que atraviesan
Mi espíritu detonándolo en la
Perpetuidad del infinito


Llámame hombre, mujer ó como
quieras.

Imagen para Eros